En Michoacán se hace necesario promover el desarrollo de una política de uso racional del agua, a fin de que de ésta surja una nueva cultura sobre su uso, recalcó la diputada Fanny Arreola Pichardo, coordinadora de la Representación Parlamentaria de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
La diputada por el Distrito de Apatzingán señaló que debe echarse mano de los recursos tecnológicos suficientes para impulsar una nueva política de manejo del agua, con respeto al medio ambiente y preservando el derecho de las generaciones futuras para acceder al uso y disfrute de los recursos hidráulicos necesarios para la vida.
“El acceso a los servicios básicos de agua y saneamiento es un derecho fundamental, por lo que el Estado tiene la obligación de controlar y proveer estos servicios a la población en general, sin discriminación alguna, no pudiendo eximirse de este deber bajo la justificación de falta de recursos”.
La legisladora destacó que el acceso al agua es fundamental para la vida, la salud, la alimentación, el bienestar y el desarrollo, por lo que el vital líquido no puede considerarse como una simple mercancía.
“Por eso es indispensable reconocer que el agua tiene un carácter de bien común público, no sólo para lo que concierne el uso potable, puesto que es esencial e insustituible también para otras actividades económicas como las agrícolas, energéticas e industriales, además es de naturaleza fundamental por el derecho a la vida digna”.
Fanny Arreola recalcó que en la gestión integrada del agua deben prevalecer la solidaridad, la conciliación de intereses y el conocimiento técnico, conducente al aprovechamiento del agua que sea económicamente eficiente, socialmente equitativo y ambientalmente sustentable.
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