Algo de Sergio Verduzco, del libro Nuestro Universalismo: «Cuerpo, Alma, Espíritu.»
Ni el espíritu eterno y divino, ni el alma inmortal, envejecen.
En tanto que el cuerpo si envejece y al final muere.
Ya mayores nos inflaman los mismos deseos, emoción, ansía de belleza y pensamiento del joven, aunque ya sin apasionamientos.
Y es que cuando se entrega el físico el alma renace sin arrugas en el espíritu.
Y algo del dominio público:
El alma no envejece; el cuero es el que se arruga.
Esto va dirigido al vejete que ya está pensando en seguir destruyendo a nuestro país, pues ya está preparando el terreno para que en encuesta a mano alzada, su «Pueblo Bueno», le pida que siga como guía espiritual, hasta agotar todas las reservas que sus antecesores neoliberales dejaron, y ya que no tenga para seguir maiceándolos, ¿Lo seguirán apoyando?
«Ahí les va»:
Si lo que de joven no pudiste hacer,
piensas que de viejo lo puedes lograr;
intentarlo te va a hacer desfallecer,
y con las ganas te vas a quedar.
«Ya Peje», «Tate sosiego pues».
«Ánimo»
Mario Gómez Aburto.
Notas Relacionadas
Impulsa Julio César Conejo Alejos el emprendimiento en Morelos
Conmemora Quiroga 114° Aniversario de la Revolución Mexicana
Conmemoran en Los Reyes 114 años de la Revolución Mexicana