Contextos: Periodismo que impulsa el desarrollo de la región

LA CONAGO Y LA SALIDA DE MICHOACÁN

Share Button
RAFAEL MORALES GONZÁLEZ
REGIDOR DE MÚGICA
9 de septiembre de 2020
Hablar de política no es, ni nunca será fácil. Pues en política, como en ningún otro asunto del entendimiento humano hay infinidad y diversidad de opiniones y criterios. Desde el punto de vista cultural, en nuestro país la política es usada como un medio, no como un fin. Y es comprensible, en ella se pueden hacer muchos negocios, y hasta fortuna, cuando sólo se vive de la política, no para la política.
 
La política trae consigo muchos beneficios y poder a quienes la saben dominar, nunca se debe perder la humildad; pero quienes la cultivan y la atesoran para sí, con el propósito de sólo lucrar, se pueden perder en un mundo de hipocresía y falsedad. La política debería ser una herramienta para impulsar el desarrollo socioeconómico y cultural de todos los pueblos. Lamentablemente, no sólo ahora, sino en todos los tiempos, la historia tiene registro de los estragos que una mala política ha ocasionado. La ambición del poder sólo por el poder puede llevar a la tragedia a cualquier pueblo. De esto un pueblo culto y legendario da su testimonio, pregúntenle a los arios. Un solo hombre fue capaz de arrasar con una vasta nación.
 
Antes de continuar con esta breve introducción, no quiero que se me mal entienda, sólo intentaba dar un enfoque general a la mala administración del poder, o a los riesgos que se expone una civilización al depositar un poder desmedido en un sólo hombre. No es bueno. Por esa razón culturas antiguas equilibraban y contrarrestaban el abuso del poder, no dando el control de los asuntos políticos a un sólo individuo, lo que equivale a un solo partido, a un solo grupo, llámesele como se le quiera llamar. El caso es que, la administración del poder, o el gobierno estaba repartido en facciones heterogéneas, por decirlo así.
 
Ahora bien, en el caso de nuestro México, hace apenas unos días que arrancó una “Consulta Popular”, para enjuiciar a los ex presidentes, acción que, desde mi punto de vista sólo acrecenta y lacera más la herida todavía palpitante de muchos de las y los mexicanos, con respecto a la historia a corto y mediano plazo de la vida política y hechos de sólo 5 personas en el país, como si se pretendiera crear leyes especiales para juzgar a sólo 5 individuos. Mi opinión al respecto ya la emití en el trabajo presentado en alusión a ese particular. Pero me interesa, dicho sea de paso, compartir, en este tema, previo del contenido que quiero exponer, la opinión de Miguel Ángel Antemate Mendoza. Defensor de derechos humanos. Premio Nacional de Ensayo Político 2005 y ganador de la medalla al mérito universitario Alfonso Caso por la UNAM: “Así, tal como se encuentra diseñado actualmente el mecanismo de la consulta popular y bajo la pregunta que se pretende plantear a la ciudadanía, estamos en la víspera de un efecto polarizante de la población, con una amplia frustración política, desgaste institucional o inclusive responsabilidad internacional. Habría que proceder con sumo cuidado”.
https://eljuegodelacorte.nexos.com.mx/?p=12056
 
La alusión anterior, sólo es una pequeña muestra, quizá de una falta de nivel político, que no lo creo, una ausencia de valores éticos y morales, tal vez; o más bien a una tendenciosa manía de jugar donde hay ausencia de criterio y de conocimiento de causa. Por lo tanto, no es de extrañar que, “los juegos del hambre”, en los que nos vemos envueltos millones de mexicanos, más unos que otros, sexenio tras sexenio, no sólo en éste, pues sabemos que nadie está libre de culpa. Pero tampoco le vamos a creer a alguien que es descendiente de la madre Teresa de Calcuta, pues ella no tuvo hijos.
 
Apegándonos un poco más a lo que te truje chencha, es lamentable, a pesar de lo que arriba citamos que, nuestra historia de México tenga que registrar un zafarrancho y desgarre de vestiduras, entre los más encumbrados y pomposos líderes de un tercio de nuestro país, independientemente de si representan o no el sentir propio y profundo de cada uno de los millones de mexicanos que vivimos en una de las siguientes entidades: Michoacán, Chihuahua, Jalisco, Durango, Coahuila, Tamaulipas, Nuevo León, Guanajuato, Colima y Aguascalientes a las cuales ellos representan, por el preciado voto que presumen haber recibido. Y es cierto que, quizá el objetivo de la CONAGO no sea el que se pretendía cuando se fundó. Pero tampoco nos queda claro si en verdad los gobernados de las entidades que acabamos de mencionar somos la prioridad en este pretendido y mal fundamentado divorcio. Creo que eso lo deberíamos de justificar o poner en la balanza de políticas públicas que en cada uno de estos Estados se llevan a cabo. La calidad de vida de los ciudadanos, a nivel nacional, no sólo aquí, es muy baja. Pero eso no es culpa de la CONAGO, ni tampoco solamente del actual gobierno, sino de todo un sistema bastante fallido por cierto, en el cual toda esperanza de crecimiento exponencial de nuestra patria está perdida, y no sólo por culpa de los gobernantes, sino porque quizá nuestras circunstancias políticas y económicas obedezcan a intereses que rebasan fronteras.
 
Sin embargo, en un punto y aparte, no debemos perder de vista que somos una República representativa, democrática, laica y federal, compuesta por Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior. Asimismo, no nos debemos confundir. La CONAGO no es ley, ni tampoco se rompe el pacto federal al salirse de la CONAGO. Lo que sí es crítico es que se tome tan a la ligera el diálogo permanente que ofrece esta Conferencia Nacional, y que al mismo tiempo se llegue a esta separación o mejor dicho división, por no coincidir con las ideas y políticas que se predican oficialmente.
 
No sé que es peor, si decidir abandonar la CONAGO, o que quien debiera conciliar, pactar y llamar a la concordia lo avale y lo tome como algo muy natural. Es triste, porque uno se confunde, a veces no sabe si pensar que es por falta de capacidad o por falta de voluntad que esto se está yendo a pique.
 
Me pregunto cómo se habría actuado en una situación como la que está pasando México ahora, nada más en el tema de la CONAGO, si estuviéramos en manos de Benito Juárez o de Lázaro Cárdenas del Río. Creo que muy diferente. Pero cada quien da lo que tiene, si es que quiere dar.
Share Button